El test mide la capacidad competitiva de una unidad (empresa, organización, área, departamento). Se entiende a la competitividad como la capacidad de interacción de una unidad frente a determinadas exigencias del contexto manteniendo la generación de recursos y la dinámica de los procesos. Es un concepto que trasciende a la “rentabilidad” y se enfoca en los recursos para crear y transformar las condiciones de participación de una unidad bajo diferentes exigencias del entorno.
Este concepto se materializa en un modelo que contempla 5 dimensiones de análisis e intervención. 1) Visión estratégica que mide la potencialidad del diseño corporativo o del modelo de negocios que definen la dimensión del rumbo estratégico de la unidad. 2) Dinámica de relaciones que mide la capacidad de vinculación con distintos sectores de públicos y el nivel de reconocimiento en diferentes procesos sociales. 3) Dinámica cultural que mide el nivel de fortaleza del sistema cultural como marco de referencia operativo, ideológico y emocional de la unidad estratégica. 4) Capacidad de innovación que mide la capacidad de crear lo nuevo, generar alternativas de desarrollo y renovar procesos y productos. 5) Capacidad de producción que mide la capacidad para generar resultados, mantener el valor de los productos, servicios y procesos.
Este no es un estudio comparativo con parámetros externos estadísticos o comparativos con la estructura o dinámica de otra unidad. Por el contrario, el objetivo es establecer parámetros internos de organización para responder de manera funcional y dinámica a los desafíos del contexto. Para ello, se toma en cuenta el siguiente criterio: una calificación del 100% representa el ideal de capacidad competitiva; una calificación del 50% o menor representa dimensiones que están trabajando al límite de su capacidad competitiva. Las dimensiones con calificaciones iguales o menores al 50% son las que pueden entrar en colapso cuando la unidad trabaja bajo exigencias extremas.